El caso de la perrita de Susana Giménez

  Era un domingo a la noche, estábamos el agente 87 y yo mirando la televisión. En el canal 10 estaban dando el programa de Susana Giménez y casi estaba por terminar cuando apareció un señor entre los camarógrafos. Era un señor desconocido, con gorra y un delantal manchado.

  Vimos que Susana estaba asustada y que ese desconocido fue corriendo hacia los camarines y se robó a la perrita de Susana.

  Ella, al ver que se la llevaban nos llamó al agente 87 y a mí para que vayamos a ver quién era ese extraño y recuperar a la perrita.

  A la tarde siguiente fuimos al estudio para revisar todo; descubrimos unas huellas que llegaban al sótano. En una mesa había una carta y la corona de la perra. La carta decía: “Si quieren saber dónde esta la perrita de Susana, tienen que ir al parque del centro, ahí mandé a un amigo que les dará pistas, a las 22:00 p.m”.

  Nosotros fuimos al parque, pero no encontramos a nadie. De pronto aparecieron cuatro ninjas y atrás, él que se robó a la perrita.

  Los ninjas nos atacaron, pero el agente y yo luchamos; el desconocido paró la pelea y dijo: “Yo soy un veterinario, pero no uno bueno, yo capturo a los animales y los tengo encerrados en la veterinaria abandonada de la esquina”.

  El agente 87 y yo quedamos sorprendidos pero luchamos contra los ninjas y los hicimos desaparecer. Luego sólo nos quedó el veterinario. Luchamos y luchamos, pero vimos que era muy fuerte.

  El agente y yo usamos nuestras armas especiales y así         terminamos con él.        

  Después le dimos la perrita a Susana y soltamos a todos los animales que estaban en la veterinaria.

 

Camila Leiva 6º B  2010